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La eco-etiqueta MSC: pesca sostenible y más información para el consumidor

Imagen de Grupo Hinojosa

26 de junio de 2018

¿Conoces la ecoetiqueta MSC? En este artículo nos detenemos en esta certificación de la organización mundial MSC (Marine Stewardship Council), que busca frena la sobreexplotación de los recursos pesqueros. ¿Conoces la ecoetiqueta MSC? En este artículo nos detenemos en esta certificación de la organización mundial MSC (Marine Stewardship Council), que busca frena la sobreexplotación de los recursos pesqueros.Te lo contamos aquí.

La industria pesquera, científicos y grupos conservacionistas han desarrollado la ecoetiqueta del MSC. Una certificación voluntaria y abierta para todas las pesquerías que practican la captura salvaje de organismos marinos, sin importan su tamaño o ubicación. Para conseguir esta certificación, las pesquerías tienen que cumplir tres principios básicos: mantener poblaciones sostenibles de peces, la minimización de los impactos ambientales y la gestión eficiente.

El MSC es una organización mundial y sin ánimo de lucro que busca frenar la sobreexplotación de los recursos pesqueros. Su objetivo se extiende hasta los mercados internacionales, donde pretende transformar el modelo de pesca actual para evolucionar a uno donde prime las prácticas sostenibles y responsables. El MSC establece unos estándares determinados para lograr la pesca sostenible y promueve la utilización de su eco-etiqueta azul.

Esta etiqueta garantiza que una pesquería está bien gestionada y es sostenible. Además, sirve para informar a la población sobre el producto que está comprando. La eco-etiqueta hace más fácil que el consumidor pueda elegir productos sostenibles en la pescadería o en un restaurante y le ofrece la oportunidad de apoyar las prácticas sostenibles de las pesquerías. Si un producto de mar lleva la etiqueta del MSC, significa que proviene de una pesquería sostenible certificada. ¿Pero cómo se consigue esta etiqueta?

En primer lugar, las pesquerías deben acreditar la continuidad de su actividad. Además, sus operaciones tienen que mantener la diversidad y productividad del ecosistema y cumplir las leyes pertinentes con un sistema de gestión eficaz.

Esta certificación MSC permite varias ventajas para las pesquerías, pues consiguen asegurar los mercados existentes, acceder a nuevos mercados y mejorar su reputación a nivel internacional. La eco-etiqueta está disponible para todas las pesquerías de captura salvaje, de agua dulce o marina, sin importar su tamaño, escala o área geográfica. No pueden optar a ella pesquerías que utilizan prácticas pesqueras destructivas, aquellas cuya actividad se realiza al margen de los acuerdos unilaterales internacionales o tienen como objetivo anfibios, reptiles, aves o mamíferos.

También se excluyen de esta certificación las pesquerías de acuicultura pura, aunque sí se permiten las pesquerías de reclutamiento asistido. Para que estas pesquerías puedan ser consideradas aptas, se valora si las pesquerías gestionan una población silvestre, cómo alimentan y cuidan a los peces y el impacto que sus prácticas tienen sobre el ecosistema.

En definitiva, se trata de una certificación que busca proteger a los océanos de los impactos ambientales causados, en la mayoría de las ocasiones, por los seres humanos. El MSC se encarga de conservar el medioambiente marino y proteger sus modos de vida garantizando unas pesquerías sostenibles con prácticas bien gestionadas.

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