Talento y felicidad. Estos dos conceptos están detrás del nuevo management.
Talento y felicidad. Estos dos conceptos están detrás del nuevo management. Con estas dos palabras, definimos y sintetizamos una disciplina a la que muchas empresas miran de reojo, mientras otras la asumen como parte de su estrategia.
Las organizaciones son conscientes de que los tiempos han cambiado. La era digital ha revolucionado la forma de trabajar. La relación con los clientes o los proveedores, la promoción y venta de nuestros productos o la captación de recursos humanos han cambiado. Las nuevas tecnologías han entrado con tanta fuerza que han puesto patas arriba a muchas compañías. Esto que a priori puede suponer un inconveniente en el camino, no deja de ser una oportunidad.
Así lo están viendo las organizaciones que están reaccionando a este reto, conscientes de que deben sumarse a la onda expansiva del cambio para sobrevivir en un mundo cada vez más competitivo y conectado.
En este contexto, voces de expertos comienzan a hablar del nuevo management. La gran diferencia con su antecesor es clara. Esta nueva corriente pone el foco en la gestión de la persona dentro de la empresa. Las personas son su principal activo. El talento que emana de ellas es clave para la organización. ¿Cómo captar ese talento, y lo que es más importante si cabe, cómo convencerlo para que se quede? Las nuevas generaciones buscan empleos que cubran sus expectativas, no ya laborales sino vitales. Quieren desarrollarse en los mejores equipos y continuar al mismo tiempo con su formación.
Por su parte, las empresas son las primeras interesadas en atraer este tipo de trabajadores. Pero, para ello, es necesario que ellas prediquen con el ejemplo y ofrezcan los valores que demandan estas nuevas generaciones. Esta reciprocidad es necesaria para el nuevo management. Si las empresas quieren atraer el mejor talento, deberán transmitir unos valores, con los que sus equipos se sientan identificados. No sólo eso, el nuevo management va más allá y busca que sus empleados sean felices en su puesto de trabajo. Habla de felicidad.
Este concepto rompedor que habla en primer lugar de felicidad en las organizaciones abre una nueva perspectiva. Las empresas pasan a tener otro papel. Dejan de controlar a sus trabajadores y pasan a acompañarlos en el desarrollo de su carrera. Éste es el verdadero cambio que propicia el nuevo management y que supone una auténtica metamorfosis.
Las empresas humanas de las que hablamos llevan a la práctica los valores en los que creen. Cada una se rige por los suyos, pero hay un denominador común imprescindible para esta corriente: la transparencia. Ha entrado con fuerza en nuestra sociedad, y no sólo afecta a las instituciones públicas o a los partidos políticos. El nuevo management plantea que las empresas sean también transparentes, hacia adentro, esto es con sus propios empleados, y hacia fuera, hacia la sociedad de la que forman parte.
Este planteamiento innovador se resume en un deseo ampliamente compartido: construir la empresa en la que te gustaría trabajar.