La transformación digital es uno de los términos más utilizados en los últimos años en la industria española. Los motivos de que esto sea así tienen mucho peso.
La transformación digital se ha convertido, por derecho propio, en uno de los principales caballos de batalla de innumerables empresas en nuestro país. Se trata, sin duda, de un camino irrenunciable para aumentar la competitividad en un mundo que ha demostrado ser cambiante día a día.
Aunque se pueden detallar muchos desafíos en el momento actual, la adaptación al cambio tecnológico es uno de los principales. No se trata de un capricho, ni una moda: exprimir al máximo todo el potencial de la robótica, el Big Data, la impresión 3D o la inteligencia artificial es clave para los años venideros. De hecho, el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo ha puesto en marcha un plan dotado de tres millones de euros para que hasta 300 compañías españolas puedan «impulsar su crecimiento» a través del Programa Activa Industria 4.0.
Tecnologías que abrirán puertas
Big data, analítica web, ciberseguridad o cloud computing son el nombre de otras tecnologías concretas que las empresas no pueden ignorar. De hecho, informes a este respecto como el ‘IoT. La oportunidad de conexión total’, elaborado por Schneider Electric ya apuntaban a que las empresas que implantan, por ejemplo, la Industrial Internet of Things (IIoT) en sus compañías puedes aumentar sus ventas hasta 1,5%. No es el único dato que apunta en esta dirección: el Observatorio Europeo de Tecnologías de la Información ya ha apuntado que en 2022 el gasto en inteligencia artificial se habrá duplicado hasta los 10 millones de euros.
¿Qué aporta la transformación a la industria del packaging?
No hace falta remitirse únicamente a datos de informes elaborados sobre este tema. Existen ejemplo reales, que se aplican en la actualidad, de que la realidad virtual, por ejemplo, ya puede ser un valor diferencial para muchas empresas. Visual Performance GO es una herramienta de realidad virtual, desarrollada por el departamento de I+D+i de Hinojosa, que ayuda a hacer más atractivos y prácticos los envases en el lineal del supermercado tras un estudio minucioso del packaging del producto del cliente y una comparativa con los existentes en el mercado. De esta forma se detectan puntos fuertes y débiles y se aplican las conclusiones para rediseñar el producto de forma virtual. Es decir, gracias a la tecnología se puede desterrar en gran parte la técnica del «ensayo-error».
Además de eliminar, o reducir, determinados procesos ineficientes no se puede olvidar otros beneficios que la transformación digital aportan a la industria, también a la del packaging, por supuesto. El Big Data permite la creación de algoritmos personalizados y embudos de ventas que puedan asegurar la fidelidad de los clientes de una empresa. Sin olvidar la opción de crear nuevos modelos de negocio o productos más adaptados a las necesidades del mercado. La conectividad aumenta el ritmo de producción, reduce los costes operacionales y permite a las empresas adquirir software y dispositivos conectados que responden con mayor eficacia a lo que pide su cartera de clientes.
¿Un ejemplo práctico de esta última ventaja? La planta de San Cayetano, atendiendo a las necesidades concretas de sus clientes adquirió a principio de 2019 la nueva EFI Nozomi C18000, que permite ofrecer las ventajas más punteras de la impresión digital adaptadas a la industria de la alimentación. Con esta impresora, se aúna el servicio especializado en el asesoramiento sobre los sistemas de embalaje óptimos para las marcas con la flexibilidad, capacidad de adaptación y personalización que permite esta tecnología.